
La Nueva Teoría Estratégica (NTE) es una propuesta teórico-práctica que se funda y desarrolla en España por Rafael Alberto Pérez, quien fue un académico, investigador e interventor organizacional con gran influencia a nivel internacional. Esta perspectiva redefine el concepto de estrategia en los campos de la comunicación y la gestión empresarial, ya que propone un cambio de paradigma respecto a las teorías tradicionales, al enfocar la estrategia no sólo como un plan preestablecido, sino como un proceso dinámico, social y comunicativo. Por ello, la comunicación es considerada la herramienta principal para articular estrategias y facilitar la interacción entre los actores involucrados, enfatizando la importancia de entender las percepciones y las emociones de los demás.
Este modelo se aleja de otros muy tradicionales al proponer que las estrategias deben considerar las interacciones humanas y las percepciones en lugar de centrarse únicamente en intereses y objetivos económicos, se trata de recuperar al ser humano en el análisis estratégico, en contraposición a esquemas que lo reducen a un "homo economicus", como el autor les llama. Las estrategias también deben ser flexibles y adaptativas en un mundo interconectado y a menudo caótico; esto implica un enfoque en la conversación –el diálogo– como principal herramienta para la resolución de conflictos y la negociación. Por lo tanto, se sostiene que la estrategia no es simplemente una cuestión de poder o competencia, sino que se construye a través de las relaciones y la comunicación entre los diferentes actores; sugiere que es necesario articular tanto los intereses y las metas individuales como los organizacionales.
A diferencia de las miradas comunes que ven la estrategia como un plan rígido, en esta se les concibe como un proceso adaptativo que se va construyendo y redefiniendo en función de los cambios en el entorno y en las relaciones entre los actores; esto significa un cambio de paradigma que transcurre de la fragmentación a la complejidad, es decir, que la estrategia debe abordarse desde una perspectiva sistémica y compleja y no desde una simplificación de la realidad; con lo cual se hace evidente que las acciones estratégicas generan efectos en múltiples niveles; por eso mismo toda estrategia no debería ser impuesta desde arriba, sino construirse socialmente con la participación de todos los actores involucrados.
Finalmente, es posible decir que en la NTE la estrategia es un método para la resolución de problemas de articulación social que promueve la innovación y la creatividad en la resolución de problemas estratégicos; siendo su principal metodología el Sistema Estratégico Relacional, el cual consiste en tres fases: a) leer críticamente el contexto de la situación a analizar, b) establecer un estado actual de la situación, ubicando un conflicto específico a resolver, y c) prospectar posibilidades como estrategias de cambio.
Cinco puntos clave para aplicar la Nueva Teoría Estratégica a los negocios:
La NTE representa un enfoque innovador que integra la complejidad humana y la comunicación en la formulación de estrategias, contrastando con teorías tradicionales que son más rígidas y centradas en el conflicto; este cambio de paradigma es esencial para abordar los desafíos contemporáneos en entornos organizacionales cada vez más complejos y dinámicos.