
El engagement, traducido como “compromiso laboral”, es uno de los elementos más importantes en la gestión de personas. Implica conexión emocional profunda entre los colaboradores y la organización, lo que se traduce en un rendimiento elevado, una baja rotación de personal y un sentido de pertenencia con los objetivos.
¡Es más que satisfacción en el trabajo!
Este término va más allá de sentirse satisfecho en el trabajo. Sucede cuando el nivel de entusiasmo, pasión y dedicación que los empleados sienten es elevado y consistente. A diferencia de la satisfacción laboral, que se refiere a un estado de bienestar general relacionado con el trabajo, el engagement es una actitud proactiva en los empleados en las tareas que se les asignan y la superación de expectativas.
¿Cómo hacer que los colaboradores necesiten el engagement?
Para que el engagement se convierta en un componente esencial de la cultura organizacional, los líderes deben construir un entorno en el que su equipo se sienta valorado y tenga razones claras para estar comprometido. Aquí es donde la Teoría de Campo de Kurt Lewin cobra relevancia.
Kurt Lewin, pionero en la psicología social, propuso la idea de que el comportamiento humano es una función del individuo y del entorno. Según Lewin, los comportamientos de los empleados están influenciados tanto por sus características como por el ambiente organizacional. En términos de engagement, esto significa que para que se comprometan con la organización deben existir fuerzas positivas (cultura organizacional fuerte, liderazgo inspirador, oportunidades de desarrollo) que contrarresten las posibles fuerzas negativas (desmotivación, estrés o boreout).
Por lo tanto, se necesita crear un lugar de trabajo donde las fuerzas que promueva el engagement sean más fuertes que aquellas que lo desmotivan. Esto puede lograrse a través de varias prácticas que fortalezcan la relación emocional entre los empleados y la empresa.
Creando fuerzas positivas
Reconocimiento y recompensas: el reconocimiento de los logros es una herramienta clave para fortalecer el compromiso. Los empleados necesitan sentir que su esfuerzo es notado y apreciado.
Tip ganador: realizar reconocimientos públicos en redes sociales corporativas. Entrega pines o stickers insignia, a los jóvenes les gusta colgarlos en sus backpacks y pegarlos en laptops.
Premios de experiencia: algunas organizaciones optan por premios a nivel de experiencias personalizadas, como parques de diversiones, cenas exclusivas o acceso a eventos especiales.
Tip ganador: investiga entre los empleados sus preferencias e involúcralos en comités que organicen estas experiencias.
Programas de bienestar integral: ofrece programas que incluyan actividades deportivas, apoyo psicológico y servicios de salud, fomentando un enfoque holístico.
Tip ganador: contrata plataformas digitales con servicios wellness on demand, así evitarás gasto fijo.
Desarrollo profesional continuo: los empleados comprometidos ven oportunidades para adquirir nuevas habilidades y crecer dentro de la organización.
Tip ganador: invierte en programas de mentoring, donde empleados experimentados guíen a los más nuevos, compartan habilidades y los preparen para otras funciones.
Sentido de propósito: ¿para qué hago lo que hago? El sentido de que el trabajo tiene un propósito mayor es esencial para el engagement.
Tip ganador: comunica el valor significativo de la organización y tus trabajadores estarán mucho más motivados a comprometerse con la empresa.
Así que invito a todos los líderes y responsables de equipos a reflexionar: ¿qué acciones están tomando hoy para que sus empleados no sólo trabajen, sino que se apasionen por lo que hacen?