PANORAMA INTERNACIONAL
¡Que manera de iniciar esta sección! Eva María Duarte de Perón inmortalizó la frase "donde existe una necesidad, existe un derecho", un apego a la conciencia para evaluar un mundo cambiante en el que Argentina gira su visión hacia un bloque que, como el más poblado y productivo del mundo, propone un nuevo orden mundial. Argentina hace uso de su derecho, reivindica el cambio, lo hace con la urgencia de saber lo duro y cruel que puede resultar vivir en recesión, posturas de un país al que urge regresar la ilusión entre nostalgia y desaliento.
El mate se une a un bloque en el que Brasil pone el ejemplo, elecciones como las vividas por Lula vs. Bolsonaro son réplicas a las batallas que Alberto Fernández resolvió para mediar entre Kirchner y Macri; políticas de discurso que requieren resultados para un volver al pasado en el que la fórmula podría concretarse en un “dime con quién andas y te diré quién eres”. Ajenos a la grilla política, India y China han abierto la puerta al tango, es lógico que Rusia se centre en otros menesteres mucho menos audaces y Brasil se alegre al contar con un nuevo aliado en el continente. Sudáfrica queda expectante sabiendo que requiere de mucha más evolución para poder hablarse de tú a tú con sus socios globales.
BRICSA (Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica y Argentina) puede ser la asociación multilateral más importante del planeta, concentrando más del 40% de la población y casi un cuarto del PIB mundial, representa un cambio geopolítico más que interesante. La pretensión argentina de incorporarse al bloque no es nueva, aunque llama la atención la falta de escrúpulo para la aceptación inmoral bajo la condena a la invasión rusa a Ucrania y el cuestionamiento al régimen Iraní, otro país interesado en la alianza que fue imputado por la justicia argentina por haber impulsado los atentados terroristas de 92 y 94. Ya puestos, sobra incidir en la objeción a dictaduras en nuestro propio continente (Venezuela, Nicaragua y Cuba) con las que infiere Ebrahim Raisi, política a fin de cuentas con evaluaciones económicas negativas para los que las sufren.
El Banco de Desarrollo de los BRICS (BND), cuyo programa de financiamiento proyectado para el periodo 2022-2026 alcanza los 30 mil millones de dólares, sabe que la expansión es una necesidad para replicar un modelo económico conquistador. Si no puedes con ellos, ¡únete! La clave a la hora de apuntalar los déficits de infraestructura y desarrollo sostenible que tienen los países emergentes pasa por la cooperación, las dificultades para acumular reservas y las demoras en los desembolsos previstos por los organismos multilaterales hacen de Argentina un recurso de conquista más que atractivo. La posibilidad de virar los swaps hacia un país que requiere liquidez enfoca a un Banco Chino que es capaz de prestar a tasas mucho más económicas a las del Banco Mundial, intercambio de capital con materia prima a favor de una producción en cadena sin competencia, una manera fina de prostituir lo que no puedes explotar a favor de evolución y liquidez.
Argentina arrastra grandes problemas que no ha podido resolver, un alto déficit de las cuentas públicas y un gasto con fuerte componente de ayuda social, se suma a este panorama en el que una importante emisión de su moneda y empleo informal siguen creciendo provocando una escasez de reservas y liquidez necesarias para afrontar pagos de deuda… ¡Mejor, imposible! Este panorama resulta propicio para la entrada a un bloque que, aunque lo critiquen, no deja de ser la versión capitalista hacia la conquista económica global, con línea de acción y propuestas como el BRICSO que, dicho sea de paso, podrá doblegar la hegemonía estadounidense y poner la puntilla a una Unión Europea en la que, sin Inglaterra, empieza a cuestionar sus bases.
Pd. ¿Y México? Todavía pagamos el favor por aquellos 18 mil millones de USD que Zedillo requirió tras la crisis Tequila, favores que duran hasta hoy y nos pueden costar la vida…
