SALUD
“Date a los demás. Dona sangre. Comparte vida”, es el lema que para el día 14 de junio este año 2018, ha elegido la Organización Mundial de la Salud (OMS) a fin de reconocer el esfuerzo de las personas que generosamente han donado su sangre y para seguir invitando a la población a sumarse.
La sangre, a lo largo de la historia, ha sido reconocida por las diferentes culturas como parte vital del ser humano, fuente de vida, dándole un significado religioso, místico, y como fuente de inspiración literaria. Existe evidencia de trasfusiones sanguíneas con sangre de animal a humanos durante el siglo XVII, pero es hasta el año de 1900 que se realiza de humano a humano.
La sangre es un tejido, los componentes que la integran son glóbulos rojos, plasma y plaquetas, es decir, se pueden llegar a beneficiar con la misma hasta tres personas diferentes. Son múltiples las situaciones en que se requiere de una trasfusión sanguínea, desde una persona accidentada, una mujer embarazada, un recién nacido, personas con cáncer o con quemaduras, entre otras. En México se reciben diariamente casi 5,000 unidades, no obstante, son tantas las necesidades existentes que casi el 80% de ellas se ocupan para reposición, lo cual deja en desabasto a los bancos de sangre para atender otros casos.
Antes de la década de los 80 no existía una legislación que normara el proceso de donación de sangre en nuestro país, por lo cual era común la venta de sangre, pero ¿esto qué implicaba? que, en ocasiones, a fin de obtener a cualquier costo la sangre, la gente pagaba lo que pedía el donante, incluso a veces sin importante la idoneidad de la sangre.
Con la creación en 1981 del Centro Nacional de la Transfusión Sanguínea, y la reforma de 1984 de la Ley General de Salud, quedó establecido que la sangre debe proporcionarse gratuitamente, a esto se adicionó en la reforma del año 2000 que la donación… “se regirá por principios de altruismo, ausencia de ánimo de lucro y confidencialidad, por lo que su obtención y utilización serán estrictamente a título gratuito”.
Son miles las personas que podrían beneficiarse con la donación de sangre, por ello es urgente que creemos una cultura de donación empezando por nuestras familias y en el ámbito en donde nos desenvolvamos. Una forma de empezar a hacerlo, además de estar conscientes de la ayuda a otro ser humano, es quitar algunos mitos por los que algunas personas se niegan a apoyar, como por ejemplo que el hacerlo puede debilitar a la persona, le puede hacer ganar o perder peso o contraer el VIH.
Las edades en que se puede donar sangre de manera segura son de los 17 a los 65 años; en promedio se puede llegar a donar cada cuatro meses, el volumen extraído es de 450 mililitros y las donaciones más seguras son de donantes voluntarios no remunerados. Antes de la donación se realiza un examen médico completo y una pequeña muestra de sangre es analizada, entre otras cosas para descartar alguna alteración, como infecciones.
Requisitos generales que establece el Centro Nacional de la Transfusión Sanguínea, para ser donante y salvar vidas.
Bibliografía
Banco de Sangre, Centro Nacional de la Transfusión Sanguínea. Disponible en: http://cnts.salud.gob.mx/interior/bs_donsan.html
Organización Mundial de la Salud. Día Mundial del Donante de Sangre, 14 de junio de 2018. Disponible en: http://www.who.int/campaigns/world-blood-donor-day/2018/event/es/
