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ECONOMÍA

Cinco misterios de la economía mundial

Por: PhD. Julen Robledo
Doctor en Investigaciones Humanísticas. Director general de Akxom.
direccion@akxom.es

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Según el escritor canadiense Lawrence J. Peter, “economista es un experto que mañana sabrá explicar por qué las cosas que predijo ayer no han sucedido hoy”. Una reflexión que nos enseña que la economía no es una ciencia exacta.

No existe una fórmula rigurosa para hacerse rico ni para construir un imperio empresarial (de ser así todas las personas la aplicarían). Aunque es cierto que sí podemos predecir operaciones simples a nivel microeconómico; cuando se trata de macroeconomía mundial, esta disciplina científica se convierte en una mezcla de luces y sombras. Ante todo, porque en el plano internacional suceden múltiples acontecimientos (decisiones políticas, escasez de recursos, guerras, cambios psicológico-sociales, surgimiento o caída de nuevas empresas, innovadores avances tecnológicos) que influyen en el futuro de la economía de formas imprevistas.

Todo ello ocasiona que la economía tenga grandes dificultades para pronosticar con precisión el devenir de los mercados. Pero ¿cuál es el lado oscuro de esta ciencia? A continuación, mostramos cinco enigmas de la economía mundial aún sin resolver:

1) Ajuste fiscal y deuda soberana

El ajuste fiscal permite equilibrar las cuentas del Estado cuando el desfase entre lo que gasta y el dinero que ingresa (por medio de impuestos) amenaza la estabilidad de las finanzas públicas. Ahora bien, mantener un gasto público mayor a los ingresos no es de por sí un problema. Un gobierno puede gastar más de lo que ingresa siempre que ese monto se financie incrementando la deuda internacional. ¿Hacer recortes en el gasto público o seguir endeudándose? En principio, lo más adecuado es reducir el gasto público. Sin embargo, esta medida no siempre funciona, porque cuando un país reduce sus gastos pueden disminuir sus tasas de crecimiento. Por lo tanto, cuando los países endurecen su política fiscal y la economía se desacelera, algunos de los beneficios conseguidos con el ajuste se pierden debido a un menor nivel de crecimiento.

2) Confianza de consumidores e inversores

El índice de confianza del consumidor mide el grado de optimismo que los consumidores sienten sobre el estado general de la economía y su situación financiera personal. Indica qué tan seguros se sienten individuos e inversores sobre la estabilidad de sus ingresos y posibilidades de gasto. Sin embargo, la confianza de empresas, accionistas y consumidores en los productos/servicios del mercado se puede ver alterada por causas variadas, convirtiéndose así en uno de los factores más cambiantes y volubles de la economía.

3) Economías emergentes

Las economías consideradas emergentes están en fase de desarrollo y crecimiento. Son países que tienen industria, alta demografía y potencial de consumo, pero cuentan con algunos factores políticos y sociales inestables. Por ello, invertir en potencias emergentes trae consigo riesgos futuros llenos de incertidumbre (devaluación monetaria, fluctuaciones de divisas, cambios de precios, falta de regulación legal y aumento de fraudes).

4) Contracción crediticia

La contracción del crédito sucede cuando se ve reducida la cantidad de dinero disponible para préstamos bancarios. Con el credit crunch aparece una limitación tanto de las posibilidades de endeudamiento para los consumidores (lo que implica una reducción del consumo) como de inversión para los empresarios (lo que restringe el crecimiento económico). Es cierto que una crisis crediticia viene causada por un periodo en el que los prestamistas son demasiado generosos a la hora de ofrecer créditos. Sin embargo, es muy difícil pronosticar el momento preciso del estallido, caracterizado por una fuerte subida de los tipos de interés de los bancos y la incapacidad de pago de los ya endeudados.

5) Crisis ocultas

Vaticinar las crisis financieras internacionales con rigor es una tarea complicada que implica muchas variables y desafíos. Ante todo, porque las crisis tienen causas de muchos campos diferentes (como política, sociología, economía, psicología, estadística, derecho o historia) que impactan entre sí de formas muy complejas e impredecibles. La disponibilidad, volatilidad y calidad de los datos para evaluar los cracks financieros hacen que sus resultados sean incompletos e inexactos, por lo que el pronóstico sobre los mercados rara vez alcanza un grado científico de objetividad universal.