Los avances tecnológicos, los desafíos económicos, el cambio vertiginoso en los mercados… todo esto nos conduce a pensar que el entorno en que vivimos es cada vez más frío e impersonal. Incluso, puede llevarnos a tener una vida en automático, carente de un rumbo mayor, enfocándonos en sobrellevar los retos diarios. Sin embargo, como líderes organizacionales podemos ser capaces de cambiar esta forma de vida para beneficio nuestro y de los demás. ¿Cómo? A través del propósito.
Una brújula que guía
El propósito lo es todo. Nos da una brújula que guía nuestro camino, nuestras decisiones y nuestra visión de la vida. No solamente a nivel personal, sino también organizacional. Es desde este ámbito donde podemos llegar a influir en la vida de muchas personas, e inspirarlas a través de un ¿por qué? y un ¿para qué? Dentro de las organizaciones, mediante el propósito encontramos un significado a lo que hacemos, ya sea un rol operativo o estratégico.
En una de mis experiencias como consultora, recuerdo bien que una persona que se dedicaba solamente a insertar una pieza en una autoparte me dijo muy emocionada que se dedicaba a salvar vidas, pues de esa pieza dependía la estabilidad del automóvil. ¡Eso es propósito!
Esto se refleja en muchas de las investigaciones sobre propósito a nivel mundial. Un estudio de PwC de 2016 sobre el propósito en el trabajo mencionó que el 79% de los líderes lo consideran como clave para el éxito en los negocios. Sin embargo, este también indica que sólo el 27% de los líderes ayuda a los colaboradores a conectar su propósito al de su compañía, lo cual es fundamental para que el propósito no sólo se vea reflejado en un marco dentro de una oficina, sino que se viva en las personas.
Viviendo el propósito
¿Cómo darle vida al propósito dentro de las organizaciones? Existen algunas estrategias que pueden ayudar a los colaboradores:
Es muy importante que el propósito organizacional se traslade de manera clara a la misión de la organización y que se lleve hacia los objetivos organizacionales. De esta manera, a través de los indicadores de negocio, puede operacionalizarse para que viva incluso en los números.
A partir del storytelling y de estrategias de endomarketing es posible trasladar el propósito organizacional a todos los colaboradores. Por ejemplo, integrando testimonios de colaboradores, clientes y personas beneficiadas de los productos o los servicios a materiales de comunicación, procesos de inducción o reinducción, con el objetivo de inspirar a las personas día a día.
Es importante que cada rol de la organización integre su objetivo y trascendencia desde la descripción de puesto y que este sea explicado al colaborador por parte del líder para que conozca, a través de este diálogo, cómo contribuye al éxito organizacional, así como el impacto a la sociedad, consumidores finales y/o clientes.
El líder es quien influye directamente a los colaboradores día con día. Por ello es fundamental que pueda ayudarlos a hacer una conexión entre su propósito personal y el organizacional para entender cómo pueden realizarse como personan al mismo tiempo que pueda coadyuvar al cumplimiento del propósito organizacional.
Las organizaciones son el lugar donde las personas pueden llegar a ser las mejores versiones de sí mismas. Desde el ámbito organizacional podemos lograr que, a través del propósito, encuentren la brújula que los guíe en el camino.