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Rascarle la panza al dragón

Por: Jorge A. Meléndez
Licenciado en Economía del Tecnológico de Monterrey, donde fue premio al saber. Director de Proyectos Especiales para Grupo Reforma
@jorgemelendez

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"Necesitamos hacerlo. Háganlo. Háganlo ya.

Las organizaciones se pudren de arriba hacia abajo. No se pudren de abajo hacia arriba.

Si en una planta nuclear los gerentes no establecen los parámetros de control sobre el comportamiento adecuado, entonces estás rascándole la panza al dragón.

Y las potenciales consecuencias con un reactor nuclear son condenadamente peligrosas.

Puedes meterte a una situación de donde ya no puedes salir".

Así narra Richard Parks en la gran docuserie Meltdown (Netflix) lo cerca de una catástrofe nuclear que llevó la terquedad de Bechtel, entonces la constructora más grande del mundo, durante los trabajos para remediar el accidente de Three Mile Island (TMI) de 1979.

"TMI es el peor accidente nuclear en los Estados Unidos (EUA) y estuvo terroríficamente cerca de llegar a ser una tragedia tipo Chernobyl", explica un artículo del diario inglés The Guardian.

En 1979 se salvaron de milagro, por un pelito. Y luego vino la remediación, porque TMI tenía dos reactores y uno de ellos estaba bien. Querían limpiar el accidentado para echar a andar el otro.

Llevaban 4 años, iban retrasados... y tenían muuucha prisa.

No te arruino el documental, pero Parks y otros valientes expertos arriesgaron sus trabajos (los corrieron) para denunciar enormes deficiencias en los trabajos y el riesgo de apresurarlos.

Hombre, con decirte que si fallaba la limpieza del corazón del reactor, toda la cosa este de EUA pudiera haber quedado inhabitable.

Sí, incluyendo Nueva York y Washington.

No dejes de ver Meltdown, porque encierra por lo menos dos grandes lecciones para la era del populismo y las fake news.

PRIMERA LECCIÓN: LO TÉCNICO PESA

Tlatoanis simplones en todo el mundo desprecian la técnica. Seguro recuerdas como Trump "sabía" (puro cuento) más que los generales, más que los científicos, más que cualquiera.

Aquí cerquita lo vivimos (bueno, lo sufrimos) todas las semanas con YSQ. Por eso era bien fácil extraer petróleo, repartir medicinas, rediseñar el espacio aéreo, quitar guarderías, etc., etc., etc. (no acabaríamos).

Esto es una soberana estupidez.

Lo técnico importa. Y mientras más compleja sea la labor o lo que se pretende transformar, más se incrementa el peso de lo técnico.

Y de la mano de lo técnico a fuerzas van los expertos. Por definición, algo complejo requiere de alguien que sepa del asunto.

Requiere de un experto.

Satanizarlos es otra soberana pend.tontera. Debe ser exactamente al contrario: un buen líder se rodea de expertos que le llenen sus lagunas de conocimiento. Particularmente en temas técnicos.

Llenar de insultos a los que saben los aleja. Y en temas complejos, alejar a los expertos puede provocar que el reactor explote.

No lo dudes ni un cachito.

SEGUNDA LECCIÓN: LA IMPORTANCIA DE NO CALLAR.

El principio de Peter Parker es más que aplicable a los asuntos técnicos: un gran poder conlleva gran responsabilidad.

El que mucho sabe no puede, no debe permanecer callado cuando líderes pentontos ignoran a la técnica.

Parafraseando a Phil Zimbardo: ante el mal (o la estupidez, agrego yo) el heroísmo es tan fácil como hablar.

Es tan difícil como no permanecer callado.

Ah, y no basta con renunciar o hablar internamente. No. Dependiendo del nivel del mal (o pendejez) hay que denunciar públicamente.

Tal como lo hizo Parks, de cuyo actuar en el caso TMI se deriva una lección final: si vas a denunciar públicamente al mal, busca ayuda.

En el caso de TMI, este héroe buscó la ayuda de una ONG llamada Government Accountability Project.

Porque los malosos de a de veras (no los imaginarios que se inventan los populistas) se van a defender a la mala.

La ayuda nunca estorbará para vencerlos o debilitarlos.

Tiene razón Parks: las organizaciones se pudren de arriba hacia abajo.

A fin de cuentas, los líderes pesan, y mucho.

Por eso los malos líderes pueden pudrir a una organización... o hasta a un país entero.

En pocas palabras...

"El mal es saber que algo es malo y seguir haciéndolo".

Philip Zimbardo, profesor de Stanford