
Un residuo es un material o producto que se desecha, se puede encontrar en estado sólido, semisólido, líquido o gas. Puede ser susceptible de ser valorizado o requiere sujetarse a tratamiento o disposición final.
De acuerdo con la definición, existirán tres clasificaciones de residuos: Residuos Sólidos Urbanos (RSU), Residuos Peligrosos (RP) y Residuos de Manejo Especial (RME), por conveniencia en esta ocasión nos centraremos en los RME, que son aquellos que cuentan o podrían contar con un factor de revalorización, es decir, si bien para el origen dicho residuos ya no tiene una utilidad, existen otros que pueden encontrarle provecho por medio del reciclaje o coprocesamiento.
Los residuos de esta clase se separan y catalogan como Manejos Especiales; en lugar de destinarse a un relleno sanitario o a un confinamiento de residuos peligrosos, suelen ser los que aportan un claro ejemplo del concepto de sustentabilidad, ya que se cumple el ciclo de /Producción-Uso-Disposición-Reciclaje/Coprocesamiento-Producción/ y volvemos a empezar.
La práctica común es que la empresa recicladora suele adquirir por un precio de conveniencia los residuos, enriqueciendo sus procesos productivos y, además, teniendo un retorno económico al concluir su ciclo comercial, y la empresa origen se beneficia al obtener un ingreso adicional por algo que para ellos no tiene utilidad.
Sin embargo, en la actualidad, es cada vez más complejo disponer de esta clase de residuos, debido a la alta cantidad de generación, lo que compromete la capacidad de las recicladoras de procesar estos volúmenes; dicha situación impacta varios sectores que con anterioridad encontraban una sinergia: Sociedad, Economía y Ambiente.
El sector de mayor afectación es el ambiente, si bien las recicladoras están “perdiendo” materia prima para sus procesos y los generadores un ingreso adicional, la realidad es que cuando un Residuo de Manejo Especial no puede contemplarse en un proceso de revalorización suele disponerse en rellenos sanitarios catalogado como RSU, ya que la segunda opción (el coprocesamiento) usualmente genera grandes costos de disposición a la compañía generadora y desafortunadamente la mayoría no procura la parte ambiental, sino la económica, siendo viable el pago por servicios de recolección y disposición a rellenos sanitarios.
Ante la situación uno trataría de plantearse soluciones que pudieran favorecer al sector ambiental, entrando en un escenario complejo de intereses económicos y cumplimiento ambiental, dificultando los procesos de disposición de los residuos; en el ideal de los casos podría buscarse el rehúso interno, sin embargo, es mayor la generación a la tasa de aprovechamiento, entonces, ligamos este artículo a conceptos vistos en anteriores, el consumo irresponsable de materias es la causa raíz de este tipo de problemáticas.
La relevancia de atender la causa raíz sería encontrar el origen de generación del material que se consideraría RME y evaluar estrategias que signifiquen la reducción de este, teniendo muchas herramientas y contactos para favorecer la recirculación de los materiales, en este ejemplo el manejo sería previo a que la empresa catalogue el material como RME en su Almacén Temporal de Residuos.
Definitivamente este tipo de controles deberían atenderse y llevarse a cabo por las compañías que presenten problemática en la disposición de sus RME, aunque la gran mayoría no tiene ese objetivo sustentable arraigado en sus políticas de operación, por ello, día tras día es más común encontrar RME dispuestos como RSU o, peor aún, como RP en confinamientos, debido a que los rellenos sanitarios también suelen rechazar los altos volúmenes de RME por cuestiones de logística y problemas socio-ambientales muy conocidos, como la falta de espacios para continuar la disposición de RSU. ¿Se imaginan que lo mismo sucediera con los RME? ¿Dónde queda la sustentabilidad en el manejo de los residuos?
Es todo un reto y esfuerzo encontrar la solución ambiental, esperemos que la tendencia vaya en pro de la sustentabilidad y logremos controlar la problemática en crecimiento y evitar así igualar las condiciones deplorables del manejo de RSU.