CIENCIA Y TECNOLOGÍA
El cerebro humano es un organismo tan complejo y fascinante para la comunidad científica como lo es el espacio exterior y el fondo oceánico. Para los neurocientíficos uno de los métodos prometedores para comprender el funcionamiento del cerebro involucra a los implantes que, en el campo académico, llevan décadas siendo desarrollados por investigadores.
Hasta hace unos años, los implantes cerebrales habían sido una tecnología desarrollada casi exclusivamente por las comunidades académicas siendo apenas en 2016 cuando la empresa privada Neuralink fue fundada por Elon Musk y un grupo de siete científicos e ingenieros.
¿En qué consiste la neurociencia?
El investigador de la Universidad de Stanford Paul Nuyujukian, en entrevista con The Economist, mencionaba: “por aproximadamente 20 años, los dispositivos de implantes cerebrales que usamos para analizar el cerebro dependían de cables que iban del implante localizado en el cerebro del paciente hasta las computadoras que reciben dichos datos, el verdadero parteaguas que hizo que los científicos prestáramos atención a Neuralink fue el uso de implantes completamente inalámbricos funcionando en animales grandes”.
¿Qué hacen dichos implantes?
En términos simples, utilizan un método de análisis conocido como “grabación neuroelectrofisiológica”, en dicho proceso y mediante los implantes se puede analizar los impulsos eléctricos que generan las neuronas y sus conexiones para realizar distintas acciones como mover músculos.
En el 2018, durante un evento de Neuralink, Elon Musk dijo: “las neuronas son como cableado, y se necesita un electrónico para resolver un problema electrónico”, en ese sentido, se ha podido ver que los implantes que se han experimentado en cerdos y monos se han dedicado a “mapear” los impulsos electrónicos que ocurren cuando dichos animales caminan, piensan o manipulan otros objetos.
¿Por qué la entrada de Neuralink en la experimentación humana es tan importante?
La ingeniería y los avances de dispositivos como los que usa Neuralink son tan avanzados y suponen ideas tan innovadoras que podrían ayudar a la comunidad científica a dar “saltos” exponenciales en los avances que se tienen hasta el momento sobre la investigación del cerebro humano, sin embargo, aún existen riesgos que deben ser avalados por los organismos reguladores en la salud como la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés), que llevarán meses, sino es que años, para poder ser cumplimentados debidamente.
¿Qué ocurrirá cuando Neuralink comience pruebas en humanos?
Es difícil saberlo, muchos medios de comunicación han escrito conjeturas que van desde que ahora los humanos podremos “leer la mente y los pensamientos” hasta la creación de cyborgs a donde mudaremos nuestra mente para conseguir “vida eterna”, pero lo cierto es que, para muchos expertos, como Nuyujukian, estamos a décadas de poder hablar de avances sustanciales, ya que la neurociencia aún se encuentra en etapas extremadamente tempranas de desarrollo.
Sin embargo, las promesas son por demás alentadoras, y van más allá de la ciencia ficción y se enfocan en la erradicación de enfermedades y discapacidades que históricamente han sido imposibles de curar como es el alzhéimer, los derrames e incluso los trastornos psiquiátricos.
