Así como el “vivieron felices para siempre” ha dejado de ser una idea romántica para la mayoría de los jóvenes, también lo es trabajar para cualquier empresa o líder. Hoy, incluso, eligen empresas más alineadas con sus sueños, valores y propósitos, por encima del salario.
Pero ¿ocurre lo mismo cuando se trata de elegir al líder? Por supuesto que sí, y si la organización abre la puerta para que tengas una entrevista laboral con tu futuro jefe, debes aprovechar la oportunidad.
Deborah Tannen, autora del libro You Just Don't Understand: Women and Men in Conversation, plantea una interesante analogía entre las interacciones de una cita romántica con las entrevistas de trabajo.
Destaca la importancia del lenguaje no verbal, la comunicación efectiva y la presentación personal para generar confianza y profesionalismo. En ambas situaciones se busca cautivar al interlocutor con preguntas inteligentes, elogios estratégicos y conversaciones memorables, habilidades valoradas en estos casos.
Al igual que en un primer encuentro de Tinder, es importante que como candidato conozcas al que será tu posible futuro jefe y ver si el match realmente existe.
La mejor forma de conocerlo es la misma que usarías para conocer a tu próxima pareja. Comienza la conversación y formula preguntas inteligentes que te lleven a identificar las green flags durante la entrevista de trabajo.
Estás son siete buenas cuestiones a explorar:
Esta respuesta te dejará saber los rasgos más valorados por el jefe y si estás dispuesto, o no, a cumplir. Si les pide trabajar horas adicionales o delega.
Aquí radica un factor clave para que des el sí. La evaluación de desempeño te deja saber cómo evaluará tu progreso hacia metas específicas y esperadas.
Esto puede ayudar al relacionamiento. Hay líderes que prefieren conversaciones espontáneas en persona, más que una bandeja llena de textos o correos.
Aparte de comprender los desafíos que afrontan en ese nivel jerárquico, te coloca en una posición de interés para ayudarle a conseguir sus objetivos.
Además de conocer el estado actual de la compañía, tienes la oportunidad de encaminar argumentos hacia iniciativas que aporten valor para superarlos.
Podrás romper el hielo y conocer rasgos más personales de quien podría ser tu futuro líder, sus valores, estilo de liderazgo y propósito.
Una caricia al ego le encanta a todo mundo y seguramente sumarías puntos a tu favor con esta pregunta. Te permite conocer su filosofía de liderazgo.
La relación con tu futuro jefe es muy importante y se construye desde la primera entrevista. Involucrarte desde el inicio te hará memorable y ayudará a incrementar tus posibilidades de éxito para conseguir el empleo.
Recuerda, todo inicia con una conversación y nunca se sabe adónde conducirá. En algunos casos puede terminar en un “y vivieron felices por siempre” (o mientras dure).