
“Dominancia física sobre los demás en el reino animal".
Así define el diccionario urbano a un macho alfa. Es la típica imagen del jefe implacable, una máscara popular en nuestra era.
Esta caricatura la ejemplifican las características del macho alfa enlistadas por el sitio "ser Alfa": tiene confianza, es mentalmente fuerte, competitivo, tiene presencia y un lenguaje corporal dominante, es poderoso, se arriesga, acapara a las hembras, grita, pelea, no requiere validación y no es amigo de todos.
Una imagen codiciada por hombres de negocios y políticos. Trump es la caricatura más patética de un macho alfa. Un narcisista terco que sabiendo poco utiliza su poder para dominar y hacer daño.
¿Sabe qué? Esta preconcepción es totalmente falsa.
"Libros de negocios te dicen como ser un macho alfa: dominando y demostrando que eres el jefe. O sea, siendo un bully. No me gusta esa definición. Y yo tuve mucho que ver en crear el término", explica Franz de Waal en una gran charla de TED.
El experto en primates escribió el libro "Políticas de chimpancés" que documenta su observación de 6 años de una colonia en el zoológico de Arnhem en Holanda. Lo que encontró es interesantísimo.
Primero, de Waal aclara también hay una hembra alfa. Todos los grupos de primates tienen un macho y una hembra alfa. Solo uno.
Confirmó algunas cosas del estereotipo. Por ejemplo, lo del lenguaje corporal dominante: "vean aquí dos machos caminando y observen que uno camina más parado, tiene levantado su cabello y porta una gran roca en la mano", explica el primatólogo.
Posturas comunes en líderes de negocios y políticos. Y es que actuar como poderoso sí confiere poder.
Pero tres de sus descubrimientos son contra intuitivos:
Cierro con dos lecciones finales:
--Mientras más respete la colonia al macho alfa, más probable será que permanezca en el poder.
--Un bully puede llegar a ser un macho alfa, pero su permanencia es endeble. "Cuando un bully pierde su poder, generalmente termina muy mal", advierte.
Buenísimos conceptos. La verdad, para tomar en cuenta en la empresa. y sobre todo para que tomen nota los (y las) nuevos machos y hembras alfa que llegarán al poder tras las elecciones. Apúntenle grillos: coaliciones para progresar, mantener contentos a los que los apoyan y empatía con todos, sobre todo con los más débiles.
Ah, y obvio: que la colonia -nuestro México- emprenda un camino de mejora sostenida. Porque la verdad en nuestro zoológico las cosas pintan muuuy mal. Basta ya de bullies ineptos y corruptos, ¿no cree?
Posdata. No por ser aguafiestas, pero veo una felicidad generalizada por los discursos y el tono de AMLO. Francamente eran de esperarse, pues hacer otra cosa sería una estupidez, sería provocar una crisis. Yo como Santo Tomás, hasta que estén gobernando no creeré que ya abandonó sus malas ideas. Remember Trump. muchos se esperanzaron que iba a cambiar, ¡y no cambió nada!
En pocas palabras.
"Ser macho no prueba mucho",
Zsa Zsa Gabor, actriz húngara-estadounidense